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El CD Cieza cae derrotado frente a la Minera y la salvación es cada vez más difícil
Javier Gómez
CD MINERA: Rubio, Martín, Gabriel, Marouane, Naranjo (76′ Sánchez), Moreno, Bermejo, Zapata, Cordero, Pagán (83′ Escusa) y Adrián (59′ Gerson)
CD CIEZA: Adrián, Daniel, Mássimo, Valentín, Fran Catuña (82′ Adri), José María, Salvador (62′ Benjamín), Omane, Gato, Rubio, Juanjo Moreno
GOLES: 1-0 (19′ Bermejo)
La derrota espartera en su visita al feudo del CD Minera complica enormemente las pocas posibilidades que le quedan a los esparteros para evitar el descenso a la Territorial Preferente. Después de esta jornada faltan otras cinco por disputarse y los ciezanos se encuentran colistas a seis puntos de la salvación. Además, se tendrá que enfrentar a tres equipos potentes, de la parte alta de la clasificación: Yeclano, Gesa-Churra y Mar Menor.
El choque arrancó bronco, con juego poco fluido por parte de ambos conjuntos. El CD Cieza intentaba mantener las líneas juntas y cerradas, impidiendo dejar espacios que pudieran aprovechar los puntas locales para generar peligro. Los esparteros intentaban mantenerse como un bloque, sólido, conscientes de su delicada situación, para lanzar contras que desarbolasen la defensa minera.
Pero el planteamiento visitante se vino abajo en el minuto 19 cuando Bermejo aprovechó una de las llegadas mineras para perforar la meta rojilla. A raíz del gol los ciezanos se echaron arriba, tímidamente, con más corazón que acierto, aunque de manera infructuosa.
El paso por los vestuarios no trastocó mucho el esquema de lo visto en la primera mitad. El CD Cieza lo intentaba como podía y, cada vez más, dejaba espacios que los locales no supieron aprovechar para sentenciar el encuentro. Los esparteros sabían que la vida se les escapaba por la brecha que había abierto Bermejo. El conjunto, mezcla de veteranía y juventud, ponía todo lo que tenía; pundonor no se le puede reprochar a los ciezanos en una temporada aciaga, para el olvido, donde se han sucedido los traspiés y las bajas. Ahora, los jóvenes aportan debido a las circunstancias, aunque no se les puede pedir que sean ellos quienes enderecen el rumbo de la nave.
Y así, agónicamente para los intereses visitantes el partido fue muriendo sin que el marcador se volviese a mover. La próxima jornada los esparteros se enfrentarán al Olímpico de Totana en La Arboleja. La victoria se antoja imperiosa. Las balas se agotan en la recámara ciezana.
