Jesús debió ser de izquierdas

Confieso sentirme cansado; terriblemente cansado. Creo estar inmerso en una inacabada guerra interior. Tras cada batalla una parte de mí parece alejarse por el horizonte, para no volver jamás.  No hay treguas ni tiempos muertos. El mal jamás desfallece. No hay un solo instante sin que él te susurre al oído. Dispondrá una y mil trampas; te guiará por caminos sin salida y sendas sin retorno. Temo quedarme sin fuerzas y que la corriente me lleve río abajo. Las recompensas del mal son fácilmente identificables pues, tras un intenso y … Sigue leyendo Jesús debió ser de izquierdas