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Con el último trabajo de Paulina Real ocurre lo que, por fortuna, es habitual en buena parte de los artistas que pasan por el Siyâsa: el no conformarse con la corrección, el no renunciar a la ambición o, lo que es lo mismo, intentar hacer algo de riesgo. Neuma’a es una obra de un nivel artístico no muy habitual en salas municipales
Crónicas de Siyâsa/cieza.es
Siguiendo la estela de la herencia local de la cultura andalusí, la combinación de conceptos tan dispares como la sinestesia, la primavera, la música, la historia y la cultura árabe da lugar a una síntesis pictórica tan sugerente como llena de frescura. Un paso adelante en el devenir de una artista ciezana cuya trayectoria ha sido sobresaliente.
Pero el acierto mayor de esta fascinante exposición es ante todo el desarrollo de una articulación estructural y un diseño expositivo que no dudan en aplicar recursos musicales, al fin y al cabo consustanciales a la naturaleza de la cultura andalusí, que alcanzan a hacer evidente a ojos del espectador el diálogo entre las obras y la línea melódica.
Un mural titulado ‘La alegría del agua’, compuesto de 14 obras en la pared principal de la sala que se disponen sobre dos líneas de color (roja para Fa y amarilla para Do), según la antigua notación musical medieval, recibe al visitante. Son, verdaderamente, piezas excepcionales admirablemente concebidas con pigmentos y acetato de polivinilo sobre lienzo para disfrutar de la delicada elegancia que encierran en su simplicidad.
Sin la menor duda, es una obra plástica hermosísima, llena de belleza en su escala de grises, donde la línea melódica dibujada por las alturas de cada cuadro refleja la notación musical de un brevísimo fragmento de música andalusí de tradición oral extraído de la nuba ‘Al Isbihân’, versionada y puesta en valor por el musicólogo Eduardo Paniagua, con el título ‘La alegría del agua’.
En unas coordenadas similares se sitúa el otro mural de menor tamaño denominado ‘La alegría de la primavera’. Y lo hace con la misma notación, pero con una línea melódica a la inversa, como en un efecto espejo y con una serie de cuadros de abstracción colorista cuyos trazos gestuales imitan el movimiento de los neumas (primitivos signos de notación musical) y otros cuentan con algunas transferencias y collages de dicho sistema de notación.
El trabajo de la artista ciezana es impactante después de encuadrar sus pinturas en un espacio arquitectónico como la sala principal del Museo Siyâsa. Y es que era ante todo un desafío que ha resuelto bien el montaje. Así, Neuma’a sale fortalecida de esta experiencia en su primera exhibición pública. En palabras suyas, «el objetivo era presentar una muestra estéticamente bella, culturalmente ilustrada y discursivamente coherente».
«Siempre he tenido un gran interés por las tradiciones y los antecedentes históricos que enriquecieron nuestro acervo cultural actual, y si hay una cultura que hunde sus raíces en lo más profundo de nuestro pasado es la cultura andalusí, la cual estuvo durante cinco siglos en tierras murcianas y cuya influencia se extendió más allá, hasta el punto de que aún conservamos muchas cosas de la misma», explicó Real.
La exposición que presenta el Museo Siyâsa hasta el próximo 23 de abril fue inaugurada este viernes por el alcalde de Cieza, Pascual Lucas, y la concejala de Museos, Pilar Martínez, y contó, entre otros, con las intervenciones de Antonio León Más, encargado de la dirección y documentación musical, y el director del Servicio de Museos, Joaquín Salmerón. Paulina Real agradeció a Loli Olivares y a Antonio Francisco Muñoz la colaboración que han prestado a este proyecto artístico.
